martes, 3 de julio de 2012

0:14 a.m.



Si nunca has salido a las cuatro de la mañana a la calle, sin dar explicaciones a nadie de a dónde vas, con quién o cuando volverás, sientiéndote totalmente libre de tus decisiones y de tu cuerpo.

Si nunca has salido de casa con un quit de supervivencia básico porque no sabes dónde acabarás durmiedo esa noche.

Si nunca has ido a Zaragoza (por ejemplo), tomado un café y vuelto el mismo día.

Si jamás has cogido prestado mobiliario urbano para decorar tu comedor.

Si no has salido de fiesta sin que te importe que al día siguiente tengas que trabajar, comer con la familia de tu novio o presentarte en una entrevista de trabajo..etc

Si sabes perfecamente qué harás mañana y pasado, y al otro.

Si no disfrutas de la incertidumbre de qué será de ti la semana que viene.

Si ya no te queda nada por conocer, mundos que explorar, personas de las que aprender, sueños que cumplir.

Si ya has hecho todo lo que querías hacer en tu vida.

Si no te sientes pequeño, minúsculo bajo el cielo infinito.

Si ya no lloras, ni ries, ni se te eriza la piel.

Si ya no hay nada de ti mismo que te sorprenda, ni reacciones que no son propias de tu persona.

Si nada te inspira.

Si no sientes mariposas en el estomago al ver a la persona que amas.

Si vives en la rutina y la aceptas.

Si eres de esas personas que viven su vida en un segundo plano, de esas que se dejan llevar.

Si ya no luchas por lo que realmente quieres.

Mi más sentido pésame, has muerto.


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